NUEVO SINGLE DOBLE Y VIDEOCLIP DE JORDI MARANGES "L’home més sexy de part forana"
El tema que da título al single homónimo se acompaña de un espectacular videoclip a cargo de la artista Veru Iché y del tema "La fruita més primerenca", una re-lectura de una conocida canción popular mallorquina
mallorquina "L’home més sexy de part forana", supone el inicio de una nuevo camino en la prolífica carrera de Jordi Maranges. El artista mallorquin deja atrás la pista de baile, la referencias al pop sintético de los 80s, la fiesta Drag por una vuelta a lo más simple: al misterio de componer buenas canciones pop. Para este nuevo single y los próximos (que son un avance de un LP para el próximo año) no ha podido sustraerse al hachazo de la realidad: la diagnosis de una enfermedad crónica, la muerte de su madre, el fin de una relación sentimental. Todo envuelto en un ambiente de crispación y estrés nuclear. Estas canciones nacen entonces del estupor y el dolor; de la perplejidad y la necesidad de purga. "L’home més sexy de part forana" es un canto a la naturaleza y al hombre rural (pero también al bosque mediterráneo, la montaña, las encinas, oliveras…) que empezó como epitafio llorón y terminó reconvertida en una canción pop queer con vocación de himno rural. La grabación fue realizada en el home studio del artista pero las mezclas y algunos elementos extras se grabaron en los Estudis Favela, con la ayuda de Michael Mesquida "La fruita més primerenca", el segundo tema que acompaña este ñanzamiento es una re-lectura de una “tonada” de campo. Una canción popular mallorquina que es un lamento atávico, un blues litúrgico con piano y sintetizadores que miran a las bandas sonoras de los 70s . Jordi descubrió esta canción a través de Biel Majoral, a quien admira profundamente pero de quien ha querido alejarse al máximo con el fin de evitar cualquier pretensión purista o folklorista. Las dos canciones se han masterizado en Urban estudios, Palma con Rafa Rigo a los controles
El videoclip de "L’home més sexy de part forana" es es obra de la artista Veru Iché y fue grabado en un bosque de Banyalbufar, Mallorca. La canción es un grito de amor al hombre salvaje que habita los bosques de y montañas de la sierra de Tramuntana pero también es un canto enloquecido por los paisajes rurales y remotos, por el espíritu dionisíaco de lo irracional y físico y un lamento por la pérdida de la inocencia. Veru Iché y Jordi Maranges hicieron un trabajo de espeleología y psicoanálisis con el fin de encontrar el hecho esencial que dormía en el fondo de la canción, más allá de los estribillos pletóricos y los pianos en Mi mayor. Buscaron como investigadores en una novela pulp, el subtexto de la canción. A partir de imágenes inconscientes fueron construyendo un relato paralelo que conseguía otorgar complejidad a la historia principal. El resultado es un vídeo fascinante y misterioso, salvaje y melancólico. Un canto a la Tramuntana y a los amores que nos transforman.